Fijar el cupularve en el cabezal de un cuadro estándar (ver orificios). Insertar una hoja de cera estampada que tenga recortada la parte de la matriz. Introducir el cuadro en la colmena y dejar que las abejas obren la cera y dejarlo para que este pase a ser parte de la cámara de cría y quede de esta manera impregnado del olor de la colmena. La matriz debe ser colocada completa, pero sin las cúpulas donde aovará la reina. Para facilitar la aceptación aplicar miel o algún incentivo sobre la matriz.
Colocar luego, las cúpulas, una porción de candi en el lugar previsto para esto y a continuación retirar el tapón de la rejilla posterior e introducir la reina. Una vez realizado esto debemos calcular el tiempo que la reina tarda en completar la postura dentro de la matriz. Si la dejáramos tiempo de mas, la reina repetirá la postura y encontraremos mas de un huevo por cúpula. Esto se debe a la falta de espacio.
Pasado 24 horas y ya estando la reina liberada, se deberá dejar el cupularve por dos días mas hasta que los huevos comienzan a pasar a la etapa de larva, momento en el cual retiraremos el cuadro.
Tomar las cúpulas con el portacupula (enchufe) y fijarlo en la base, clavada previamente en el listón. Inmediatamente colocarlo en la colmena iniciadora entre dos cuadros de cría abierta para garantizar la mayor asistencia y temperatura por parte de las nodrizas.
Al día siguiente retirar las cúpulas que no fueron aceptadas, y pasar el mismo a la colmena continuadora.
Mantener el cuadro en la colmena hasta el 12 º día, para luego pasar las celdas a los núcleos de fecundación debidamente orfanizados.